La cerveza de la semana: Intrinsical, God Save The Intrinsical Extra Special Bitter

Este ejemplar viene a honrar todo el camino recorrido desde su fundación en 2013, hecha con maltas especiales y clásicas, en términos de lúpulos recoge algo del nuevo mundo, como la variedad Centennial, pero con la carga aromática e histórica de Fuggles.

La influencia de la escuela inglesa en el mundo de la cerveza está más presente que nunca. Las American IPA no existirían si no fuera por la India Pale Ale. Y muchas de nuestras adoradas cervezas belgas, tampoco existirían de no ser por la inspiración de las recetas británicas y de sus procesos.

Pero los ingleses definen sus cervezas Pale Ale a menudo como bitters. Traducido literalmente como “amargo”, se pueden subdividir en Ordinary Bitter, Best Bitter (referida a la mejor pale ale que puede hacer un productor) y las Extra Special Bitter, o ESB, que son las más alcohólicas y corpulentas. Hasta la fecha, la única manera de diferenciarlas es por la fuerza de IBU (unidad de amargor internacional) y ABV (alcohol por volumen). Si bien el nombre podría sugerirte un amargor intenso, las ESB no son abrumadoras. Más bien, son muy equilibradas y fáciles de beber. Ligeras en el paladar, sabrosas y refrescantes. Esto, gracias a la modernización producida desde finales del siglo XIX, debido a la mejora en los procesos de producción y el aumento de variedades de lúpulos disponibles.

God save the Intrinsical, de Cervecería Intrínsical, viene a honrar todo el camino que han recorrido desde su fundación en 2013, reflejado en esta ESB de receta bien inglesa. Con maltas especiales y clásicas como Pale Ale, en lúpulos recoge algo del nuevo mundo, como la variedad Centennial pero con la carga aromática e histórica de Fuggles

El vaso elegido es una pinta inglesa o Nonic. Durante su servicio, podemos observar una cerveza con más cuerpo o densidad, acaramelado y cristalino, generando una corona de espuma inusualmente cremosa para el estilo, de color beige, pero atractiva. Junto con disfrutar visualmente, comienzan a aflorar aromas de sus maltas como galleta de avena o manzana roja. Además de las notas florales, herbales y resinosas de las variedades de lúpulo inglés. Los aromas se reproducen al beber. Como cerveza bien balanceada hacia las maltas, en boca, los granos nos ofrecen una dulzura intensa de caramelo, mientras que los sabores secundarios a pan tostado, bizcocho, manzana roja confitada y algo herbal, añaden complejidad. El amargor terroso y resinoso de los lúpulos cierran esta experiencia con equilibrio entre dulzor y amargor, pero con cierta sequedad final, que aporta una gran característica de la Escuela Inglesa: la facilidad de beber.

El maridaje. ESB es muy versátil, sobre todo, pensando en nuestras comidas tradicionales. La tuesta de las maltas y su caramelización, equilibrada con el amargor resinoso del lupulo, acompañan muy bien con productos dorados por el fuego, algo quemaditos y el dulzor de ciertas carnes. Un buen ejemplo, la empanada de pino, una entraña crocante, sánguche de mechada en marraqueta crujiente. Pastel de papas, cerdo al horno y un sinfín mas. Para postres, si o si, mote con huesillo. Y si algún día, tenemos la suerte, una manzana roja confitada. Pensando en la nota picante que pudiera aportar el lúpulo, juegue con algún queso tipo cheddar o platos condimentados como charquicán o estofados. En honor a la simplicidad, acompañaría muy bien un queque de naranja o galletas de mantequilla.

Como ve, una cerveza versátil, fácil de beber y con mucha historia.

4,6° Alc. y 35 IBU
Disponible en: beershop.cl, beervana.cl, intrinsical.cl
Precio referencial: $2.100 – $ 3.100